Según Mariyan Peev, presidente de la ZKPU “Maglen” y de la Asociación Búlgara de Agricultura Innovadora (BAIZ), en la noche del 7 al 8 de abril, las temperaturas en muchas regiones del país cayeron por debajo del umbral crítico de -5 ° C, lo que causó daños directos e irreversibles a una serie de cultivos.
“Los cultivos de frutales han sido destruidos en un 90%: albaricoques, ciruelas, cerezas. No se trata solo de congelación. Las células de las hojas han sido destrozadas por el choque térmico. No habíamos visto tanto frío en esta época en más de 20 años”, dijo Peev. Pero en Bulgaria nadie protegió los cultivos frutales de las heladas antes del 20 de abril.
Bulgaria es el tercer exportador mundial de cerezas en conserva, con exportaciones en 2024 por más de US$ 31 millones. Ésta helada va a afectar seriamente a la materia prima disponible para la agroindustria de ese país que exporta US$ 199 millones en total de productos del ámbito de Chilealimentos.
