Actualidad nacional e internacional
Abr. 22, 2021
Valencia-España: perspectivas comerciales de carozos se apartan de las pérdidas proyectadas para el resto de España, Francia e Italia
El campo valenciano empieza en unos días la recolección de las variedades más tempranas de frutales de hueso con unas perspectivas favorables tanto desde el punto de vista productivo como comercial, según recoge la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA), que prevé una cosecha de duraznos, nectarino, ciruelo y níspero de excelente calidad, con suficiente calibre y sin mermas generalizadas de producción, a diferencia de lo ocurrido en la última campaña cuando las adversidades climáticas disminuyeron en un 30% el volumen comercial.
Entre las comarcas que tienen un buen comportamiento vegetativo, AVA-ASAJA ha destacado La Ribera, Los Serranos, Alto Palancia y La Marina Baixa; por el contrario, el albaricoque, sobre todo en la Vall d’Albaida, y la cereza, en La Marina Alta y El Comptat, presenta campos con importantes mermas de cosecha a causa de la humedad. “En el cómputo general, el arranque continuado de campos debido a la crisis de rentabilidad evita que el aforo aumente en la región respecto a la media de los últimos años”.
Asimismo, ha añadido que la temporada valenciana contrasta con la significativa reducción de oferta de frutas de hueso que va a haber en otras zonas productoras. En este sentido, ha explicado que varias comarcas de Lérida, Tarragona y Huesca registraron en marzo temperaturas de hasta -5 grados que ocasionaron graves daños en frutas de hueso y otros cultivos; en Francia el Gobierno ha declarado el estado de calamidad climatológica tras la ola de frío iniciada el 5 de abril, siendo las frutas de hueso las más vulnerables, y en el Valle del Ródano se da por seguro que los siniestros en frutales pueden llegar al 90%. “El mismo temporal azotó regiones italianas como la Toscana, Piamonte y Lazio con daños medios de hasta el 80% de frutas”.
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, ha pedido “calma a productores y comercializadores que operan en la región porque las condiciones objetivas de mercado, especialmente la menor oferta nacional y europea, favorecen la obtención de precios justos para todos los eslabones de la cadena, sin necesidad de sacrificar al productor como viene sucediendo”.
Aguado ha añadido que “el talón de Aquiles de este y otros cultivos es el ruinoso precio en origen. Los agricultores lo tenemos muy claro: si no obtenemos una remuneración digna, seguiremos dejando más y más campos sin cultivar; si en cambio recibimos un precio razonable que permita cubrir los costes de producción, entonces la agricultura tendrá futuro y ayudará a rodar al resto de la economía”.
También se ha referido a la Ley de la Cadena Alimentaria, en fase de reforma por parte del Gobierno, y ha señalado que “podría mejorarse y extender su ámbito de actuación al nivel europeo, que es donde tenemos nuestro principal mercado de exportación”. A su juicio, la UE y los Estados miembros deberían consensuar la decisión de sacar el sector agrario de las normas de Competencia, sobre todo los productos agrarios perecederos como las frutas de hueso. “No podemos dejar los precios justos en manos de los abusos comerciales o de los caprichos del clima, hay un margen de mejora que depende únicamente de la voluntad política”.
Agroinformación/22 de abril 2021