La tormenta que tuvo en vilo a los municipios de Jumilla (Murcia) y Hellín (Albacete) el pasado sábado ha dejado serios daños en gran parte de los viñedos situados entre el suroeste y el sureste de la Denominación de Origen Protegida Jumilla, afectando a más de 4.700 hectáreas de viña y un total de 20.000 de tierras de cultivo.
La granizada entró por las pedanías de Hellín, al suroeste de la Denominación de Origen, afectando las pedanías de Las Minas, con mayor virulencia, y la pedanía de Agramón, donde ha dejado pérdidas millonarias en infraestructuras y el sector agrícola.
Las autoridades locales han realizado una solicitud de zona catastrófica para destinar ayudas a los agricultores.