Para 2030, la industria polaca del arándano podría alcanzar un punto de inflexión . Cuenta con la superficie de cultivo suficiente para aumentar sustancialmente la producción si mejoran los rendimientos. Sin embargo, si los precios se mantienen bajos, algunos pequeños productores podrían abandonar el cultivo o cambiar de cultivo, lo que ralentizaría el crecimiento. El escenario probable es una estabilización de la producción en torno a los niveles actuales, con posibles ligeros aumentos. Polonia podría producir más de 70.000 toneladas para 2030 si todo marcha bien, pero una mayor proporción podría destinarse al consumo interno o a la elaboración.