En Alemania, se prevé que la producción de fresas a campo abierto caiga en 2025 a sus niveles más bajos desde 1995. Según estimaciones de la Oficina Federal de Estadística (Destatis), las explotaciones agrícolas alemanas esperan una cosecha de tan solo 75.500 toneladas, una marcada disminución respecto a las 78.600 toneladas de 2024. Esto representa una disminución interanual del 4 % y una caída del 24 % en comparación con la media semestral del periodo 2019-2024, que se situó en 99.900 toneladas. Esta disminución alarma a los operadores de la cadena de suministro de frutas y hortalizas y pone de manifiesto las debilidades estructurales del sector.