La campaña comercial 2025/26 se ha caracterizado por desafíos agrícolas sin precedentes en Turquía, con fuertes heladas, sequías, granizo y lluvias excesivas que han afectado significativamente la producción frutícola.
Se prevé que la producción de cerezas disminuya un 60%, hasta las 400 000 toneladas métricas, mientras que la de melocotones y nectarinas se reducirá un 45%, hasta las 649 000 toneladas métricas. Estas pérdidas han impulsado al alza los precios internos y reducido los volúmenes de exportación, ya que los productores priorizan los mercados locales.