Las heladas agrícolas que azotaron Turquía causaron una de las mayores pérdidas en los últimos años al sector agrícola. Ordu y Giresun, ubicadas dentro de las principales zonas productoras de avellanas, fueron dos de las provincias afectadas. En las tierras altas, las heladas quemaron las avellanas. Representantes de los productores afirmaron que se producirá una pérdida de entre el 40 % y el 50 % en la producción de avellanas, e incluso una disminución en la misma en los próximos años.